🌐 ¿Y AHORA QUÉ HACER?

El mundo ha llegado a una encrucijada que ya no admite neutralidad. El mito de la hegemonía como garantía de estabilidad ha colapsado, dejando al descubierto un modelo basado no en equidad ni progreso compartido, sino en dominación estructural y dependencia perpetua. Durante décadas, los países del sur global han sido arrastrados a la retórica del “desarrollo” mientras sus riquezas eran drenadas, sus decisiones intervenidas y sus narrativas invisibilizadas. El modelo económico neocolonial no fue un error — fue una arquitectura. Hoy, decimos: basta. La pregunta ya no es si resistir, sino cómo reconstruir. Y la respuesta comienza con integración internacional soberana — una herramienta no para el globalismo ciego, sino para el multilateralismo consciente y justo.

World War News TV™

6/22/20253 min read

🌐 ¿Y AHORA QUÉ HACER?

La IntegraciĂłn Internacional como AntĂ­doto al Proteccionismo Unilateral y TĂłxico para la HegemonĂ­a y la ArmonĂ­a Global

Por Javier Clemente Engonga™ | World War News TV™
Serie: La Guerra Mundial Contra la Corrupción™

I. INTRODUCCIÓN: FIN DEL JUEGO

El mundo ha llegado a una encrucijada que ya no admite neutralidad. El mito de la hegemonĂ­a como garantĂ­a de estabilidad ha colapsado, dejando al descubierto un modelo basado no en equidad ni progreso compartido, sino en dominaciĂłn estructural y dependencia perpetua.

Durante décadas, los países del sur global han sido arrastrados a la retórica del “desarrollo” mientras sus riquezas eran drenadas, sus decisiones intervenidas y sus narrativas invisibilizadas. El modelo económico neocolonial no fue un error — fue una arquitectura.

Hoy, decimos: basta.

La pregunta ya no es si resistir, sino cómo reconstruir. Y la respuesta comienza con integración internacional soberana — una herramienta no para el globalismo ciego, sino para el multilateralismo consciente y justo.

II. EL MITO DEL DOMINIO JUSTO

Durante generaciones, se nos ha dicho que el orden mundial estĂĄ diseĂąado para preservar la paz, distribuir el conocimiento y proteger a los mĂĄs vulnerables. Pero la historia nos demuestra lo contrario.

  • Los paĂ­ses con mĂĄs recursos naturales son los mĂĄs empobrecidos.

  • Las democracias mĂĄs promovidas desde fuera son las mĂĄs inestables.

  • Los tratados de libre comercio han funcionado como candados financieros disfrazados de cooperaciĂłn.

  • El FMI y el Banco Mundial han operado como agencias de ingenierĂ­a de deuda antes que motores de desarrollo.

Esto no es colapso. Es diseĂąo.

Y el objetivo ha sido claro: garantizar que las naciones del Sur global nunca controlen completamente sus decisiones internas ni externas.

III. EL PROTECCIONISMO UNILATERAL: UNA PESTE MODERNA

Frente al agotamiento del modelo neoliberal, muchas potencias han optado por replegarse en nacionalismos econĂłmicos que justifican el cierre de fronteras, el blindaje de mercados y la priorizaciĂłn unilateral de sus intereses estratĂŠgicos.

Este proteccionismo moderno no sólo es tóxico — es incompatible con la vida planetaria.

ÂżPor quĂŠ?

Porque no se trata de proteger cultura o soberanĂ­a (ambos valores legĂ­timos), sino de cerrar la puerta del desarrollo a quienes histĂłricamente fueron excluidos.

Al imponer sanciones, condicionar exportaciones, o manipular las tasas de interĂŠs globales, los Estados dominantes no protegen su pueblo. Blindan su hegemonĂ­a.

IV. LA INTEGRACIÓN COMO ANTÍDOTO

Frente a este paradigma venenoso, la Ăşnica alternativa viable y justa es una integraciĂłn internacional soberana y simĂŠtrica, fundada en los siguientes principios:

  1. Equidad real, no caridad condicional.

  2. Transferencia tecnolĂłgica sin chantaje diplomĂĄtico.

  3. Monedas locales fuertes e interconectadas.

  4. Reforma urgente del sistema de Naciones Unidas y sus agencias.

  5. Redes de conocimiento descentralizadas y plurilingĂźes.

No se trata de crear nuevos imperios. Se trata de redefinir los tĂŠrminos de la interdependencia.

V. EL CASO AFRICANO: EJEMPLO Y EXIGENCIA

África es el mayor espejo de este conflicto estructural. Posee el 60% del suelo cultivable del planeta, mås del 40% de minerales estratÊgicos, la población mås joven del mundo... y, sin embargo, tiene la menor capacidad decisoria global.

ÂżPor quĂŠ?

Porque se le ha impedido integrar sus mercados, desarrollar sus industrias y ejercer su poder narrativo.

Por eso, África no sólo exige justicia. África es ahora el eje de la reconfiguración planetaria.

VI. ROMPER EL CICLO: NARRATIVA + INFRAESTRUCTURA

Para poner fin al modelo neocolonial, no basta con denunciar. Debemos:

  • Escribir nuestros tratados.

  • DiseĂąar nuestras plataformas tecnolĂłgicas.

  • Financiar nuestras historias.

  • Establecer nuestros estĂĄndares y certificaciones.

  • Intercambiar entre nosotros sin depender de terceros.

La soberanĂ­a ya no es solo polĂ­tica. Es tambiĂŠn narrativa, digital, econĂłmica, energĂŠtica, mental.

VII. ¿Y AHORA QUÉ HACER?

  1. Reconocer que la “globalización” actual ha sido una farsa asimétrica.

  2. Construir alianzas intercontinentales horizontales: África-SuramÊrica, África-Asia, Sur global-Sur global.

  3. Reactivar modelos de integraciĂłn regional con fondos propios, no prestados.

  4. Crear una red soberana de medios, datos y conocimiento.

  5. Codificar la memoria histĂłrica como motor legal y econĂłmico.

VIII. CIERRE: EL MITO TERMINÓ

El mundo ya no puede sostenerse sobre mentiras. Ni sobre discursos vacĂ­os de libertad mientras se pacta con la opresiĂłn.

El mito del dominio justo ha muerto.
Y el modelo neocolonial estĂĄ desnudo.
Lo que viene no es un cambio de liderazgo — es un cambio de lógica.

La integraciĂłn internacional soberana no es una utopĂ­a.
Es la Ăşnica salida si queremos sobrevivir con dignidad.

Y en ese camino, la voz de África ya no pedirå paso. Abrirå camino.

Por Javier Clemente Engonga™
Presidente y CEO
World War News TV™ — El Único Medio Soberano del Planeta™
📍 Malabo — Londres — Operaciones Globales

🛰️ Validado por SAT‑HALCÓN LUMUMBA™ | Directiva WWN‑INTEGRAXION‑009

“Nada de lo que aún no ha sido contado puede salvarse del olvido si no se escribe con coraje y se defiende con estructura.”